Capítulo 17

Categorías Diario de una jubilada3 comentarios

Hola amigos:

Estoy muy orgullosa de haber colaborado en tener unos geranios tan abundantes y coloridos. Llaman la atención desde la calle, observo que la gente se queda mirándolos asombrada. Me siento como la Dama de los Geranios.
Hoy ha llovido casi todo el día. Las inclemencias del tiempo repercuten negativamente sobre las flores y mis geranios andan heridos al igual que mi corazón. Necesitamos tiempo, paciencia y amor para volver a florecer.

Tres meses se han cumplido, qué poco tiempo ha pasado y cuanto tiempo sin él. Aunque es verdad que sigo ganando momentos al tiempo y eso es buena señal para mi corazón.

A partir de hoy he tomado una decisión. Voy a seguir adelante con alegría, voy a terminar las cosas que tenia empezadas y voy a seguir acompañando a la vida, planificando lo mejor para mi presente y compartiendo con las personas queridas, que sé que tengo muchas, me siento una privilegiada, ¿porque, qué puedo hacer? Seguir regando mis geranios y verlos florecer a la vez que mi corazón.

Pronto continuaré, terminaré y publicaré mi novela. Es una promesa para conmigo y para con los demás.

Os voy contando y sigo siguiendo a la vida.

Hasta pronto, amigos.

3 pensamientos en “Capítulo 17

  1. Enhorabuena por ese ánimo, Manoli. Y ¡a seguir regando esos geranios! Y…espero con ansias la publicación de tu novela. Un fuerte abrazo

  2. Los geranios, las flores, la vida, las amigas, las chicas malas y las buenas también están colgadas de tus maceteros, ese amplio mundo está escondido detrás, pero ellos, los geranios, quieren el protagonismo porque son los que están dándote color y porque te incitan a mirar al exterior. Ánimo con todo amiga que tú puedes… ❤❤❤

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *